Cuando alquilar tiene sentido
Las noticias sobre vivienda fueron tan frecuentes y dramáticas que me perdí un detalle interesante: la demanda de alquileres aumentó. Según el Centro Conjunto de Estudios de Vivienda, "con tanta agitación en el lado de la venta, muchos hogares reconsideraron sus opciones financieras y optaron por alquilar en lugar de comprar".
Si bien la propiedad de la vivienda a menudo se promociona como el sueño americano, estoy de acuerdo en que no es necesariamente la mejor opción para todos los estadounidenses. Claro, ser propietario de una casa puede tener sus privilegios, pero hay algunas situaciones en las que tiene más sentido alquilar. Antes de tomar la decisión de comprar su propia casa, considere los siguientes ejemplos de situaciones en las que puede tener sentido alquilar.
Tienes un crédito menos que perfecto. Desafortunadamente, no todos califican para las mejores tasas de interés. Antes de quedar atrapado en un compromiso de 30 años, es posible que desee mejorar su posición pagando la deuda y estableciendo un buen historial crediticio. El alquiler puede darle el tiempo necesario para lograr estos objetivos.
No planea estar en su residencia por más de unos pocos años. El costo inicial de comprar una casa es elevado y solo puede ser una buena inversión si tiene tiempo para pagar parte de su deuda hipotecaria. El alquiler, por otro lado, normalmente no requiere que pague honorarios de agentes inmobiliarios o costos de cierre, lo que hace que las mudanzas frecuentes sean menos costosas.
No estás preparado para todas las responsabilidades de ser propietario. Cuidar una casa requiere mucho tiempo, energía y dinero. Al analizar su situación, no olvide considerar los requisitos de seguro, las necesidades de reparación y mantenimiento del hogar y las obligaciones de la asociación. Por el contrario, los costos de mantenimiento a menudo están incluidos en el precio del alquiler.
No se pueden tolerar inversiones arriesgadas. Como aprendimos, no podemos asumir que el valor de las viviendas aumentará. Como inquilino, el riesgo de propiedad recae en el propietario.
Sus habilidades de administración del dinero necesitan mejorar. Un préstamo hipotecario es probablemente la deuda más grande en la que incurre la mayoría de las personas y la decisión de comprometer con este elemento costoso debe tomar en serio. Dado que los costos de vivienda de la mayoría de las personas consumen entre el 20 y el 33 por ciento de sus cotizaciones, debe cerciorar de que puede cumplir continuamente con esta responsabilidad.
Finalmente, puede estar seguro de que su tarea y preparación lo ayudarán a disfrutar de la casa de sus sueños, independientemente de si elige alquilar o ser propietario.