Seis maneras rápidas de aprender a usar el crédito
Los estudiantes universitarios constituyen el segmento identificable más grande de clientes primerizos para los emisores de tarjetas de crédito, y la competencia por el mercado universitario es feroz.
Aunque la Ley CARD hizo ilegal que los emisores de crédito invadieran los campus universitarios ofreciendo camisetas y botín gratis, los adultos jóvenes sin duda estarán expuestos a numerosas ofertas atractivas de tarjetas de crédito.
Cuando se usan sabiamente, las tarjetas de crédito pueden ayudarlo a establecer un historial crediticio respetable y servir como un activo valioso para futuras oportunidades de financiamiento. Sin embargo, cuando se maneja incorrectamente, la deuda resultante puede convertir en una terrible responsabilidad que puede persistir luego de la graduación.
Con esto en mente, las siguientes son las seis cosas que todos deben saber antes de abrir una línea de crédito. Debes saber:
- Tu cotización. ¿Cuánto de sus ingresos mensuales se destinará a pagar las facturas de las tarjetas de crédito? Los pagos mensuales de la deuda no deben exceder el 20 por ciento de su salario neto mensual o asignación mensual.
- Tus opciones. Busque tarjetas con tasas de interés bajas, poca o ninguna tarifa anual y un "periodo de gracia" razonable para permitir "tiempo libre" antes de que comiencen los cargos financieros.
- Los riesgos involucrados. ¿Qué pasaría si no cumpliera con el contrato de la tarjeta de crédito? Solo unos pocos pagos atrasados o cortos podrían tener un gran efecto en su tasa de interés y archivo de crédito. Una vez manchado, un buen historial crediticio es difícil de reconstruir.
- Tus límites. El hecho de que tenga un límite de crédito de $ 1000 o $ 2000 no significa que pueda permitir el lujo de mantener un saldo tan alto. Tenga en cuenta que la mayoría de los pagos mínimos promedian el cuatro por ciento del saldo total adeudado.
- Fechas de vencimiento. Una de las mejores cosas que puede hacer para establecer o mejorar su crédito es pagar sus facturas a tiempo. Esto no se limita solo a las facturas de su tarjeta de crédito o préstamos estudiantiles, sino que también significa su alquiler, servicios públicos y facturas telefónicas.
- La letra pequeña. Antes de firmar cualquier acuerdo, cerciorar de que su tasa de interés no se disparará en seis meses, y cerciorar de que las "recompensas" que obtenga no se vean superadas por altas tasas de interés. Y recuerda, las tarjetas de crédito no son dinero nuevo, dinero gratis o más dinero. ¡Son sólo préstamos que tienes que devolver!
La conclusión es sencilla: Si no dispones de dinero extra en tu cotización para pagar el importe cobrado (¡incluidos los intereses!) dentro de un tiempo razonable, no puede permitir el lujo de incurrir en deuda.