Proteger del fraude
-Estar informado. Puede informar sobre las estafas conocidas actuales visitando IDTheftCenter.com.
-Practicar la debida diligencia. Antes de realizar cualquier compra, averigüe si se registró alguna queja en la oficina del Fiscal General. Si bien un historial de quejas limpio no es una garantía, es un paso en la dirección correcta.
-Tenga cuidado con las apelaciones de alta presión. Por ejemplo, sé escéptico si alguien te agradece por una promesa que no recuerdas hacer. Las compañías legítimas no deben intimidarlo para que haga una donación o compra en el acto.
-Sea escéptico. Si alguien le promete una manera fácil de ganar dinero rápido, tenga cuidado. Como dice el viejo refrán: “Si es demasiado bueno para ser verdad, probablemente lo sea”.
-Recuerda tu cotización. Incluso si una solicitud resulta ser legítima, preguntar si realmente es algo que desea. Recuerde, antes de que llamaran, probablemente no sabía que "necesitaba" lo que están vendiendo.
-Encabezarlos en el paso. Pídales a los vendedores telefónicos que lo incluyan en su lista de "no llamar". Según la ley federal, están obligados a cumplir. Si continúan llamando, puede demandarlos en la corte de reclamos menores. Para obtener información sobre cómo detener el spam de email no aplicar, revise las leyes de su estado en SpamLaws.com.
Si sospecha que hay una estafa, llame al Centro Nacional de Información sobre Fraude al 800-876-7060.