¡Sigue algunos consejos de mamá!
Con las mamás, cada momento puede convertir fácilmente en un momento de “enseñanza”. Desde el primer día, las madres comienzan el proceso de transferir su sabiduría y valores a sus hijos. De hecho, un estudio reciente de NFCC descubrió que el 44 por ciento de los consumidores nombraron a sus padres como sus principales maestros de hábitos financieros: los conceptos básicos del gasto y el ahorro se aprenden en casa mucho antes de que se muestren en la escuela.
A medida que se acerca el Día de la Madre, aplique algo de la sabiduría convencional de mamá a su situación financiera, junto con los consejos de los expertos financieros aquí en MMI.
- “El dinero no crece en los árboles”. Piensa en cómo gastas tu dinero y no te pases de tus posibilidades. Reserva el dinero que te sobre al final del mes para ahorrar: nunca sabes cuándo puede surgir un gasto inesperado.
- "Haz lo que te digo, no lo que hago". Si no te mostraron buenos hábitos financieros mientras crecías, comienza ahora. Los buenos hábitos que aprende ahora pueden transmitir a sus hijos, comenzando una nueva generación de responsabilidad financiera.
- "¿Parece que estoy hecho de dinero?" Los estudios muestran que casi el 80 por ciento de las mujeres se consideran las que más gastan en su hogar, pero no dejes que esto sea lo único que tus hijos te vean hacer. Haga un esfuerzo por discutir el ahorro, la planeación de metas a largo plazo y la cotización con los niños para que aprendan que el dinero es más que facturas y compras.
- “Si te vuelvo a pillar haciendo eso…” Todos somos culpables de usar esa tarjeta de crédito “solo para emergencias” en un capricho egoísta, pero ¿alguna vez nos pusimos a ver cuánto suma a largo plazo? Realice un seguimiento de sus gastos durante 30 días para ver cuánto suman al final sus pequeñas e insignificantes compras.
- "Come cada bocado". Recuerda que cada poquito cuenta. Coloque su cambio de repuesto en un frasco, junto con cualquier dinero extra que esté por encima de sus ingresos mensuales regulares, y deposítelo en su cuenta de ahorros mensualmente.
- "Si todos tus colegas saltaran de un acantilado, ¿lo harías tú?" Usted tiene el control de su dinero y su cotización debe ser único para sus necesidades personales y estilo de vida. Quédate con él, independientemente de cómo gasten los demás a tu alrededor.
Por mucho que duela admitir que su madre tenía razón, sus consejos de sentido común, cuando se aplican a su bolsillo, pueden conducir a la estabilidad financiera y al éxito. Luego de todo, como dice mamá, "Puedes hacer cualquier cosa que te propongas".