Amor, matrimonio y deuda
Shakespeare acuñó la frase "El amor es ciego", pero si Shakespeare estuviera presente hoy, podría estar inclinado a cambiarla por "El amor es ciego, pero no si tienes un montón de deudas, en cuyo caso el amor ve ese negocio y necesita que te ocupes de él lo antes posible".
¿La evidencia contra la ceguera del amor? Una encuesta reciente realizada por la Fundación Nacional para el Asesoramiento Crediticio (NFCC), que encontró que la mayoría de los encuestados tendrían serias reservaciones sobre asumir la deuda de la persona que aman.
- El 37 por ciento se negaría a casar hasta que la deuda de su pareja estuviera completamente pagada
- El 10 por ciento se casaría, pero no ayudaría a pagar la deuda de su pareja
- El 7 por ciento simplemente terminaría la relación con una pareja endeudada
El 46 por ciento restante de los encuestados estaba dispuesto a casar y luego pagar conjuntamente la deuda de su pareja.
Proteger
Tiene sentido que en muchos casos los consumidores dejen de lado sus emociones y consideren las participaciones de la deuda asumida. Los problemas financieros siempre fueron una de las principales causas de descontento en las relaciones. Es la naturaleza humana. Demasiada deuda o muy poco dinero nos coloca en una posición vulnerable. Nos hace sentir inseguros y la seguridad es uno de nuestros motivadores principales.
Por lo tanto, encontrar enamorado de alguien con una deuda considerable u obviamente con malas habilidades de administración del dinero lo pone en una posición complicada. El corazón dice: "Sí", pero la mente dice: "Acerca de este puntaje de crédito..." Porque además de crear sentimientos de peligro potencial, los problemas de dinero de su pareja tendrán un impacto real y tangible en su vida conjunta. Como pareja, es posible que le resulte difícil comprar una casa o un automóvil. Es posible que se rechacen las solicitudes de alquiler y se enfrente a primas de seguro más altas.
¿Significa esto que el 7 por ciento que se alejaría de una relación debido a la deuda tiene razón? No necesariamente. Estas son las claves para que funcione.
- Comunicación. Si no te atreves a hablar de dinero (especialmente de problemas de dinero), solo estás buscando problemas. Mantén todo a la intemperie. Haga que las conversaciones de dinero sean un lugar seguro para expresar sus preocupaciones y haga todo lo posible para escuchar realmente a su pareja.
- Compromiso. Es muy raro que tu actitud hacia el dinero coincida al 100 por ciento con la de un socio potencial. Esté abierto a realizar pequeños cambios en el modo en que usa y ve el dinero, pero cerciorar de que su pareja esté igualmente abierta al cambio.
- Comprométete a mejorar. No cometas el error de convencerte de que tú tienes razón y tu pareja está equivocada. Eres simplemente diferente Y, francamente, ambos pueden mejorar. Así que comprometer a identificar dónde les gustaría estar como pareja y trabajen juntos para alcanzar esa meta.
El amor y el dinero siempre irán de la mano y el equipaje financiero puede ser pesado, pero reconocer y abordar sus diferencias contribuirá en gran medida a hacer realidad el felices para siempre.